Archivo de agosto 2011

El Castillo de Neuchswastein

El Castillo de Neuchswastein fue construido durante el reinado de Luis II y se construyó en los pies de los Alpes alemanes. Hoy en día, este juego entre el castillo y los Alpes da una sensación prolija de una vista extraordinaria de lejos, y de cerca, pues queda mucho por decir. Este tipo de castillos es un cambio radical al tipo arquitectónico que tienen todos los castillos de esa época.

Esto sucede porque este castillo no tenía en su haber sitios de defensa o lugar para ocultarse, era un castillo más que nada hecho a la orden del rey para que los Alpes se vistieran de gala y ese perfecto Castillo de Neuchswastein fue el resultado. Como dicen algunos turistas: este castillo se hizo para que queden más bonitos los Alpes.

Castillo de Neuchswastein

Hay varias traducciones para Neuchswastein, pero la más cercana es la que significa “nuevo cisne de piedra”. Y es que la belleza que la acompaña es de un cisne erguido hecho por una beldad única.

Antes de llegar al castillo, te percatarás de algo que has visto al inicio de películas de Walt Disney: el castillo es similar al de Neuschwanstein. Es muy sonado que Walt Dinsey se copió la idea del castillo para sus películas, que ahora son superproducciones.

Para llegar al castillo, debes comprar unos boletos que te darán el acceso para disfrutar de este magnífico recinto. Debes recorrer una pendiente, así que si deseas puedes seguir con tu auto, aunque te recomiendo que vayas en un coche de caballos que está a la disposición de todo público a un precio cómodo como para revivir los momentos pasados.

El interior del castillo es esplendoroso pues cuenta con 15 habitaciones ceremoniales. Igualmente, está el salón del trono que tiene columnas pintadas por todos lados porque el rey Luis II, las quería así. Los visitantes se quedan conmovidos porque en el lugar del trono hay una pintura de Jesús y sus doce apóstoles. Durante el recorrido de todo el castillo, contarás con un guía que te narrará las historias de cada habitación, pues cada una tiene su leyenda y son muy entretenidas.

Tomar fotografías al interior del Castillo es casi imposible porque está prohibido y los guardianes están resguardando cada lugar. Sin embargo, al exterior puedes tomarte todas las fotos que desees. Incluso, te quedarás boquiabierto del gran parecido que tiene con el castillo de Walt Disney.

Las Cataratas del Iguazú

Las Cataratas del Iguazú se encuentran en el límite entre Brasil y Argentina, en el Parque Nacional Iguazú. Es cuatro veces más grande que las Cataratas Niágara. Las Cataratas se dividen en dos caídas de agua gracias a La Isla San Martin. La parte con mayor cantidad de agua se llama La Garganta del Diablo. Esta parte de la Catarata es la que divide a Brasil y Argentina. Lo bueno es que si quieres visitar estas cataratas, puedes acceder desde los dos países, desde Foz do Iguaçu, Brasil o desde Ciudad del Este, Paraguay. En el otro lado de la Isla San Martin existe una variedad de cascadas y caídas de agua, como Salto San Martín, Salto Eva, Salto Adán, Salto Bossetti, Salto Dos Hermanas, Salto Chico, entre otros.

Las Cataratas de Iguazu

Dos tercios de las Cataratas se encuentran en Argentina, donde puedes visitar el Parque Nacional Iguazú, que presenta una flora y fauna exquisita. En Argentina, hay caminos alrededor de las cataratas para que puedas acercarte y verlas de cerca, aunque probablemente tu ropa termine mojada. En Brasil también hay caminos aunque estos se enfocan más en los panoramas del lado argentino y de la Garganta del Diablo. Es recomendable que esta visita la hagas en dos días para que puedas ver la vista de ambos países.

El lado de Brasil en más panorámico y te muestra una vista espectacular. También hay paseos por botes o helicópteros, que te presentan una mejor vista de la zona. Es preferible si llegas temprano porque las mejores fotos se toman con la luz de la mañana. En la posición donde se encuentran las Cataratas, se puede apreciar la perfección de la naturaleza. Si deseas visitar las otras pequeñas cataratas, la Isla San Martín te puede llevar a ellos. Allí, también, podrás apreciar una diversidad de aves, como varias especies de loros, tucanes, así como mariposas de bellos colores y también jaguares, pumas y ocelotes. Esta aventura salvaje es sólo recomendable para los amantes de la adrenalina.

Las mejores temporadas para visitar las Cataratas son primavera y otoño. En verano el calor tropical aumenta y presenta mucha humedad. En invierno el nivel del agua baja considerablemente, lo cual no te daría una experiencia máxima de las cataratas. Pero sea la temporada que sea, no puedes dejar de visitar las Cataratas del Iguazú y admirar la naturaleza en su belleza extrema.

Parque Arqueológico Tikal

Algunas veces olvidamos que los países centroamericanos tienen sus atractivos turísticos por las culturas antiguas que han dejado un sinfín de cosas por ver y que ha dejado sobrecogido a muchas turistas y fotógrafos mundiales de la National Geographic, por nombrar algunos ejemplos. Guatemala es uno de esos países, donde se une la antigüedad con el presente y es un lugar para ser recordado siempre.

Entre los más exclusivos parajes está el Parque Nacional Arqueológico ubicado en Petén, el departamento más grande de Guatemala. Al parque se puede llegar en avión o en carretera, pero te recomiendo que vayas en carretera para que puedas apreciar los lugares que están antes de llegar al parque. Hay diferentes tours por tierra y por avión, pero como os repito, lo más recomendable para conocer esta cultura es ir por carretera.

Parque Arqueológico Tikal

Cuando llegues al hotel o donde te hospedes y menciones que estás de visita paraconocer el Parque Arqueológico Tikal escucharás un un conglomerado de historias nefastas. Todas son leyendas, tal como te explicará tu guía turístico, todo sucedió en la época maya. Las leyendas están escritas en los libros de historia y por lo demás, no sucede nada. Los guatemaltecos creen mucho en estas cosas, aunque no las han vivido.

Cuando llegues a Tikal, visitarás el parque tranquilamente, los guías turísticos estarán siempre contigo para enseñarte cada resto arqueológico que dejaron los ancestros como el Templo Maya. Lastimosamente, hay algunos templos donde no se puede subir, esto es para cuidarte de que te pueda suceder alguna lesión, pues algunas veces llueve mucho y la parte exterior del tempo, por donde se sube a resbalosa. Es mejor seguir lo que dicen los guías turísticos, porque algunas veces, también, es accesible subir. No se puede nombrar un mes del año donde esté todo despejado pues esa zona es cambiante en el clima.

Por lo demás, estarás gratamente emocionado de conocer los lugares que tiene el parque, hay animales silvestres en estado de extinción como los jaguares, pero esas zonas están restringida para los turistas. Los guardabosques están siempre atentos para que no te equivoques de ruta (es imposible errar porque el camino está bien asfaltado), que es siempre señalada por el guía turístico. Escucharás cantar a las aves en su habita natural, y verás monos y tarántulas que no se ven en otras partes del mundo. Es un lugar recomendado para quienes les agrada la aventura, la flora y fauna silvestre.

Turismo en Río de Janeiro

Río de Janeiro, la ciudad de la samba de Brasil, así como tantas otras, pero nada como su encanto que nos brinda desde su hermosos estadios de fútbol, sus playas, sus monumentos y sus iglesias.

Entre sus principales maravillas encontramos al Cristo Redentor, desde su altura se puede apreciar todo Río de Janeiro. Incluso, algunas postales que llevan los visitantes son tomadas por los fotógrafos profesionales desde allí. El Cristo Redentor está en el Cerro del Corcovado y mide 709 metros, ya te imaginarás la vista que se suscita desde ese panorama.

Cristo de Corcovado

Para llegar al Cristo de Corcovado debes pasar por el parque Tijuca, en este parque hay cascadas que te pueden dejar conmovido, ya que aquí fue donde se decidió preservar esta selva donde está prohibida la tala de árboles. Es una “Reserva de la Biosfera” según la UNESCO.

Hay muchas personas que prefieren caminar para llegar al Cristo de Corcovado. A través de esta vía, gozarás de los caminos que hay antes de llevarte la impresión de ver todo Río de Janeiro.

Te guste el fútbol o no, no puedes dejar de visitar el Museo del Estadio Maracaná. Aquí es donde los uruguayos le ganaron a Brasil en el Mundial de 1950, bautizado por periodistas deportivos de la época como el “Maracanazo”. En este estadio recién se inauguró el Museo en el 2002. Como un buen estadio de fútbol que ha departido glorias y desastres en el fútbol brasileño conserva las reliquias del fútbol como camisetas, shorts y hasta calzados de los astros brasileños.

Las playas de Río de Janeiro son conocidas mundialmente, y habitualmente aparte del Cristo Redentor es la máxima atracción para los visitantes que se postran en el azul de sus mares. Las más conocidas son Copacabana, Leblon e Ipanema. Quién no ha escuchado de Copacabana, ya que es sonado. Ipanema con ese sonidito de la canción “Mujer de Ipanema”, playa lujosa de alto nivel rodeado de restaurantes ostentosos. Leblon es más que nada para pasear tranquilamente, es una playa menos recorrida que Copacabana. Hay otras playas como Botafogo, si gustas de la música, entonces ese es tu lugar porque allí se hacen conciertos.

Para finalizar el recorrido tan agradable por Río de Janeiro es inevitable, visitar la Catedral de esta ciudad. Sus vidrios impresionantes con imágenes de la resurrección de Cristo, son un tema muy atrayente. Así es Río de Janeiro, una ciudad multicultural, donde hay playa, religión y relajo.