Chichén Itzá, el legado de los mayas
El Chichén Itzá es uno de los lugares arqueológicos más importantes de la península de Yucatán, en México, y también es uno de los más visitados. Es un rastro dejado por la civilización maya, las construcciones pertenecen a la época del ocaso de la propia cultura maya denominada como el periodo posclásico. Es un lugar asombroso enclavado dentro de la misma naturaleza de la península yucateca. Su estado de conservación depende del monumento que se visite.
Por ejemplo, el Templo de Kukulcan y el Juego de Pelota se encuentran en buen estado, sin embargo el Templo de los Guerreros y el Observatorio están cerrados al público, de manera que pueden cuidarlos de su deterioro. No puedes dejar de subirte al Castillo, la majestuosa vista que ofrece justifica todo el esfuerzo para aguantar los 91 escalones. Sin duda, el templo de Kukulcán es el monumento más impresionante del Chichén Itza y una obra maestra de la arquitectura mayatolteca.
Al emprender un viaje hacia este fabuloso destino debes tener en cuenta lo siguiente: El clima se caracteriza por ser extremadamente caluroso y seco ya que la época de lluvias es en el verano, así que es preferible usar sombreros para protegerse del sol, si es de paja mejor.
Las temperaturas oscilan entre 20 y 40 grados, con un promedio anual de 34 grados. Los meses entre Octubre y Marzo son los más frescos. El mejor momento para viajar al Chichén Itzá es durante el equinoccio de primavera, cuando el sol refleja en la escalinata del Templo KuKulcán una sombra simulando una serpiente. Esto sólo sucede en esa época del año así que te aconsejo llegar con anticipación porque el lugar es muy concurrido y visitado por ser un día muy especial.
No debes preocuparte por la moneda porque se maneja tanto el peso mexicano como el dólar estadounidense. De todas maneras, puedes hacer cambios de dinero en el aeropuerto, hoteles, bancos y casas de cambio. La gastronomía es un deleite que destaca por su alta calidad de elaboración y la delicia de su sabor. La cochinita pibil es uno de lo más destacados, es carne de cerdo en salsa de achiote cocinada en horno de tierra. También debes probar la sopa de lima, que se prepara con carne de pavo y trozos de tortilla frita. Otros platos mayas o los mestizos son las crepas de chaya, queso relleno y huevos mutuleños, todos exquisitos para el paladar.
