Blog de Viajes

La poesía es mundial. La podemos encontrar en cualquier parte del mundo, pero Turquía tiene su propio poeta llamado Jalal al-Din Rumi, o simplemente Mevlana que es un emblema nacional y que tiene un mausoleo dedicado a su nombre.  La ciudad que alberga este mausoleo es Konya donde llegan muchos turistas para conocer el panteón donde descansa este poeta que es reconocido y querido en su país. La ciudad está un poco desgastada aunque se ha tratado de levantar gracias a la llegada de turistas, sin embargo, hay algunas cosas que no les gusta a los visitantes que llegan y que en cierta manera ha hecho que estos, solo se queden un día, porque está prohibido tomar cerveza y las mujeres no siguen la tradición de seguir con velos para cubrirse el rostro. Pero la gente sigue llegando para ver este famoso mausoleo.

Según las estadísticas nacionales de Turquía, el mausoleo de Mevlana es el segundo más visitado de Turquía, como para resaltar que la poesía sigue vigente en un país que sigue en busca de un sitial turístico en el ojo mundial. El vate turco es reconocido porque amaba a todas las personas, sean de cualquier religión, y siempre hablaba del amor, así como lo decían sus versos. Algo que es muy estilado en esta parte de Turquía es ver danzar a los derviches, quienes son los seguidores del poeta Rumi y que es una de las atracciones de la ciudad. Los derviches danzan dándose vuelta sobre sí mismos. Se le puede ver haciendo esto durante varias horas, según sus pensamientos siguen danzando y no se cansan, ya que Rumi los está protegiendo. Algunas historias de Rumi son realmente fabulosas, y otros ciudadanos lo comparan hasta con un dios por la forma de dar tanto amor.

Muchos turistas que quieren beber este misticismo se quedan a ver como es el recorrido por este mausoleo. Se puede apreciar muchos turcos y, sobre todo, iraníes, ya que el poeta era persa, y sus obra solo se puede leer en el idioma parsi. Si piensas quedarte unos días, no te preocupes por la comida, pues en la ciudad están los mejores corderos de Turquía. Estarás saciado con Rumi, pues la imagen del vate está en todos lados. Incluso, tienen hasta publicidad. Para que veas cuanto se puede amar a un poeta y sus versos de amor a la humanidad.

La Mezquita Azul se encuentra ubicada en Estambul, la ciudad más grande y poblada de Turquía. Se le conoce también como la Mezquita del Sultán Ahmed I, debido a que él ordenó la construcción de este maravilloso monumento. El Sultán Ahmed I era un rey religioso que se convirtió en monarca a los catorce años. Él decidió que la Mezquita se construyera en donde se encontraba construido el Gran Palacio de Constantinopla. Él le confió este gran trabajo al arquitecto Sedefkar Mehmet Ada. El arquitecto comenzó su trabajo en 1609 y le tomó seis largos años completar la mezquita. Esta hermosa creación se completó en el año 1617.

Al visitar la Mezquita Azul, uno obviamente espera ver una edificación de color azul, sin embargo, el exterior de la mezquita es simplemente ploma. En realidad, el nombre Mezquita Azul se debe a que la estructura en el interior es de color azul. La Mezquita se encuentra rodeada por gran patio y en la entrada hay ocho portales. El patio interior está construido con mármol, al igual que las columnas, sólo que estás también están hechas con granito. En medio del patio hay una fuente, que es utilizada para la purificación ritual, y en los alrededores se pueden apreciar seis columnas. Estas columnas son torres elevadas y estrechas que fueron construidas para realizar convocaciones durante la oración. La Mezquita Azul es la única mezquita en Estambul que tiene 6 columnas; cada una es el soporte de tres balcones. Al caminar más adentra llegarás a la cúpula principal, que se encuentra rodeada por cuatro mini cúpulas en cada uno de sus cuatro lados.

Mientras realizas tu recorrido, te darás cuenta que la mayoría de las paredes están cubiertas con temas florales. En total se utilizaron casi 22 mil azulejos de arte fino y puro. También se puede apreciar diseños increíbles de bronce y de madera dentro de la mezquita, además en el lado izquierdo de la galería está la prisión del Sultán Ahmed I. Se puede visitar la Mezquita a cualquier hora del día, excepto cuando se realizan las oraciones, especialmente los viernes que las oraciones toman más tiempo, debido a que es un día santo, y por esto, la Mezquita se cierra por un par de horas. Igual se puede acceder por la puerta de los costados, en donde no se hacen oraciones. Lo bueno es que se paga absolutamente nada para entrar.

La temporada recomendada para visitar Turquía es la primavera y el otoño porque el clima se vuelve más templado. Aunque como el clima turco es típicamente mediterráneo, con veranos calurosos y e inviernos suaves, cualquier época del año es aconsejable. Es importante añadir que hay diferencias climáticas sustanciales entre las costas y las zonas interiores.

Los consejos para viajar a Turquía:

• La hora local es una hora más que en España y la documentación requerida es el pasaporte o el D.N.I con una validez mínima de tres meses y un visado que se obtiene y se paga a la llegada al aeropuerto por 15 euros.
• Si necesitáis recargar los móviles, cámaras de fotos, de vídeo, etc. Debéis llevar un adaptador de enchufe para tres clavijas planas. La corriente eléctrica es de 220 voltios a 50 Hz.
• No es necesaria ninguna vacuna para entrar en Turquía. Cuidado con el agua del grifo, mejor beberla embotellada.
• La lira turca es la moneda oficial. No se puede adquirir en España. Para realizar el cambio de euros a liras, son recomendables las oficinas de cambio donde suelen cobrar menos comisión que las oficinas de aeropuertos, bancos o en mucho hoteles donde también ofrecen esta opción. Nunca hay que cambiar euros en la calle. No hay problema con las tarjetas de crédito.
• En el equipaje debe lleva ropa ligera, sombrero, unas buenas gafas de sol y un jersey por si refresca por la noche, en verano. En invierno, la ropa de abrigo riguroso. El calzado debe ser adecuado para anda. Turquía no tiene ninguna exigencia de vestimenta especial, salvo para entrar en mezquitas donde debes llevar brazos y piernas cubiertos, y las mujeres también deben cubrirse el pelo. En el resto puedes ir como quieras evitando pantalones excesivamente cortos o escotes de vértigo.
• La gastronomía turca está basada en ingredientes de la cocina mediterránea ; es decir, verduras, pescado, carne, frutas y aceite de oliva. Hay que tener en cuenta que, las comidas se adelantan al horario español. En la mayoría de restaurantes se come barato y delicioso. El té, el borek, el pilaf, el yogurt y los kebabs son muy típicos y hay que probarlos.
• Las compras en Turquía deben hacerse esencialmente en los bazares, donde se pueden adquirir una amplia variedad de productos artesanales, entre los que destacan: las alfombras y kilims, el cuero y las especias. Cuidado con la adquisición de imitaciones y prohibido comprar perfumes por la calle, ES AGUA! Recuerde que el regateo es imprescindible.