Ciudad de Bruselas, capital encantadora
Ciudad de Bruselas, la capital mágica de Bélgica, tiene diferentes atractivos. Algunos considerados Patrimonio de la Humanidad como el Grand Place. Además, de su famosa Galerías Saint-Hubert y el célebre Atomium. Si uno camina por estas calles, siempre hay un interesante atractivo turístico que apreciar.
Uno de los atractivos turísticos más sobresalientes de Bruselas se encuentra en el corazón de la ciudad: Grand Place, una de las más bellas plazas que existen en el mundo. El estilo barroco y gótico de varias residencias que rodean la Grand Place le da un toque especial. Algunos de estos recintos albergan museos.
El Hotel de Ville o Ayuntamiento se encuentra alrededor de esta plaza. Sin embargo, el conjunto de estructuras es admirable en sí. Cada dos años, la plaza se embellece aún más cuando se cubre de flores representando diferentes motivos. Por lo demás, uno puede disfrutar de lo que se ofrece alrededor de la plaza como los restaurantes, bares, saborear alguna comida típica, o descansar tomándose un café.
El símbolo de Bruselas es el Atomium, una estructura de hierros caracterizados en un átomo. El Atomium se encuentra en el Bruparck, en donde también está Mini-Europa, un museo en miniatura de las principales atracciones turísticas alrededor de Europa.
En Bruselas, a unas cuadras del Grand Place está una graciosa estatua de un niñito orinando sobre un pedestal: el Manneken Pis. En las calles que circundan la estatua, el comercio está en todos lados: cientos de tiendas que ofrecen los opulentos chocolates belgas y las prendas de encajes, que son las más valoradas en el mundo. Y si de museos se trata Bruselas alberga los más prestigios museos como los Museos Reales de Bellas Artes; el Centro Belga de la Historieta, un disfrute para los amantes del humor gráfico; y el Museo de Instrumentos Musicales, que tiene aproximadamente 2,000 instrumentos en exhibición.
En Bruselas, los citadinos hablan dos idiomas como el francés y el alemán, los cuales son lenguas oficiales. Aunque muchos citadinos consideran el francés como la lengua materna. El inglés también es comprendido entre los lugareños, pero menos usado.
El turista no puede dejar de visitar el Teatro Real de la Moneda, palacio de la ópera en Bruselas. El Palacio Real, que más que una residencia para los reyes belgas, es un monumento histórico. Hay decenas de iglesias que pueden ser visitadas pero las más famosas son la Basílica de Koekelberg y la Catedral de San Miguel.
