Consejos para un viaje a México
Si tienes previsto viajar a México, te daremos algunas pistas para que te puedas organizar. Empezaremos por las cuestiones prácticas. En lo referente a la documentación, hay que llevar el pasaporte con una validez mínima de 6 meses. Aunque los ciudadanos españoles no necesitan visado, sí que hay que hacerse una tarjeta de turista que está disponible en las embajadas y en los puestos fronterizos. La mejor época para conocer México dependerá de la zona que quieras visitar. Si viajas al sur de México y quieres ahorrarte las lluvias, los huracanes, el calor bochornoso y la masificación de turistas… debes viajar de abril a junio. Recuerda que de septiembre a noviembre es época de huracanes. Si vas a ir al norte es importante que sepas que entre mayo y octubre es la temporada húmeda. Recuerda poner en la maleta un botiquín básico de primeros auxilios, los cambios de aires pueden producir algunas incomodidades.
Una de las principales preocupaciones de quienes tienen previsto visitar este país es el tema la seguridad. Lo cierto es que hay que si vais con cuidado y no corréis riesgos innecesarios, no tenéis porque tener ningún problema. Sobre todo, no hay que obsesionarse con la inseguridad. Debes tener presente no es un lugar donde dar rienda suelta a la aventura y lo más sensato es seguir los consejos generales de las agencias y los guías. Básicamente te damos tres consejos: no visite zonas problemáticas, no vayas a lugares alejados cuando oscurezca, no cojas taxis, ni ningún otro servicio, no autorizados y no lleves encima objetos de mucho valor.
Una de los síntomas que se suelen padecer en México es la venganza de Moctezuma. Esta expresión se refiere a las desagradables diarreas provocadas por el cambio de aguas y de alimentación. Así que si quieres evitarlo, bebe sólo agua mineral y ni se te ocurra probar los alimentos crudos o poco cocinados. Come con precaución, especialmente las comidas picantes y fuertes. En todo caso es muy aconsejable llevar en la maleta el fortasec.
Si viajas a México DF ten cuidado con el mal de altura. La capital mexicana está alrededor de los 3.000 metros de altura. Para evitarlo, debes tomarte el primer día con calma para que tu cuerpo se aclimate, nada de movimientos bruscos ni comidas copiosas. Si empiezas notar dolor de cabeza, mareo o dificultad para respirarla, vete a descansar. El día siguiente estarás como nuevo. Otro problema del DF es la contaminación atmosférica, que pueden causar irritación en ojos, fosas nasales y garganta… pero nada preocupante. Si vas a la zona de playas, no te olvides el protector solar y si tu destino es la selva no sobrevivirás sin tu repelente de mosquitos.
